El tradicional Belén del Parque San Telmo cumple una arraigada costumbre de la ciudad con la Navidad. El Belén más antiguo de la ciudad se viene exponiendo a todos los ciudadanos de la capital grancanaria desde la década de los 50 y, salvo cortas interrupciones, regresa cada año para situarse alrededor de un gran árbol, uno de los más añejos del Parque, formando parte del paisaje navideño capitalino.
Desde hace nueve años, el belenista Fernando Benítez es el encargado de recrear esta tradición en una superficie que ocupa un perímetro de 40 metros y que ha sido colocada a la altura de los más pequeños. A diferencia de otros belenes que recrean el paisaje local, el Parque San Telmo luce un Belén hebreo en el que se escenifican paisajes de la tierra de Nazaret y Belén. Para ello, se utilizan construcciones de la edad de Jesucristo recreando tanto las casas de techos abovedado de la época como sus paisajes montañosos y rocosos.
Más de 1.000 figuras ambientan este Nacimiento en el que no faltan, además de las figuras centrales, detallados mercados con delicados enseres, cestas y puestos de frutas, fuentes y ríos en miniatura o elaboradas imitaciones de animales.
Desde hace nueve años, el belenista Fernando Benítez es el encargado de recrear esta tradición en una superficie que ocupa un perímetro de 40 metros y que ha sido colocada a la altura de los más pequeños. A diferencia de otros belenes que recrean el paisaje local, el Parque San Telmo luce un Belén hebreo en el que se escenifican paisajes de la tierra de Nazaret y Belén. Para ello, se utilizan construcciones de la edad de Jesucristo recreando tanto las casas de techos abovedado de la época como sus paisajes montañosos y rocosos.
Más de 1.000 figuras ambientan este Nacimiento en el que no faltan, además de las figuras centrales, detallados mercados con delicados enseres, cestas y puestos de frutas, fuentes y ríos en miniatura o elaboradas imitaciones de animales.
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